Sentir el mundo a través de un postre
Sentir el mundo a través de un postre
Imagínese que en un futuro pudiera visitar a un «psicólogo del chocolate». Una persona que se dedicara a escucharle y creara, según sus sentimientos, el chocolate más adecuado para su estado de ánimo.
Pues esto quizá no tarde mucho en llegar ya que la «mood food» —la alimentación que puede ayudarnos a cambiar de estado de ánimo y hacernos sentir mejor— cada vez está más extendida.¿Por qué? Porque con la vida tan estresante que llevamos, permanentemente conectados, necesitamos que la comida nos haga sentir bien, y nos permita afrontar mejor el mundo que nos rodea. La comida se ha convertido en una parte de nuestra identidad, muestra lo que valoramos,
nuestras preferencias, y con eso conseguimos los codiciados «me gusta».
Y nosotros, como chefs, ¿cómo podemos hacer que la comida influya en nuestro humor? Dándole forma, textura, sabor, color e incluso sonido.
Y no es ciencia-ficción. Uno de los estudios más famosos sobre cómo influyen las formas en nuestra mente presenta el denominado «efecto Bouba / Kiki». Este efecto fue descubierto por el psicólogo germanoamericano Wolfgang Köhler en 1929, que relacionó los sonidos con formas. Ahora se ha extrapolado a la comida.
Fíjese en este plato:
¿Qué lado es Bouba y qué lado es Kiki? La mayoría de la gente dice que Bouba es el lado izquierdo y Kiki es el lado derecho. Bouba es el chocolate con leche y Kiki es el chocolate negro.
La sonoridad del nombre de la comida, su forma, el plato en que se sirve... todo ello influye en el sabor de lo que comemos. Así que nuestros sentidos están interconectados y establecen relaciones entre las formas, los colores, los sabores y los sonidos.
No olvide pensar en el color, el sabor, la forma y la textura, y piense incluso en bautizar sus creaciones cuando cree su próximo postre.
Si le apetece conocer mejor el «mood food», suscríbase a nuestra newsletter e inspírese en las creaciones del chef Seung Yun Lee basadas en la comida de la felicidad.